El fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, acusó este lunes al presidente de Chile, Gabriel Boric, de usar el asesinato del exmilitar venezolano Ronald Ojeda para atacar a su país. Saab calificó la investigación chilena como “pirata” y “mediocre”.
En una rueda de prensa, el fiscal afirmó que Boric, a quien describió como una “persona con daños cognitivos básicos”, ha sido “el principal vocero contra Venezuela”. Según Saab, el mandatario chileno está utilizando este caso como parte de una “guerra judicial” (lawfare) para dañar la imagen del país caribeño.
Saab aseguró que Boric orquestó una campaña contra Venezuela, vinculando el asesinato de Ojeda con la supuesta existencia de la banda criminal Tren de Aragua, la cual, según el fiscal, ya no opera.
Por su parte, el ministro chileno de Exteriores, Alberto van Klaveren, se reunió el viernes con el fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI), Karim Khan, a quien entregó pruebas sobre el asesinato de Ojeda. Chile considera que esta información puede ser útil para la investigación sobre crímenes de lesa humanidad en Venezuela, abierta por la CPI en 2021.
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El fiscal venezolano insistió en que la investigación chilena es “la más pirata y mediocre del hemisferio occidental”, llena de “vacíos legales e incongruencias”.
Saab también afirmó que, según las autoridades venezolanas, Ojeda había sido detenido por “actividades conspirativas”, incluyendo rebelión y traición a la patria. Según el fiscal, el exmilitar formó parte de un plan de golpe de Estado dirigido por un general de brigada y otros 11 militares, cuyo objetivo era atentar contra el presidente Nicolás Maduro.
El fiscal agregó que, tras huir de Venezuela en 2017, Ojeda siguió participando en acciones violentas contra el Estado venezolano desde Chile.
El asesinato de Ronald Ojeda
Ojeda fue secuestrado el 21 de febrero de 2024 en Chile por un grupo de hombres disfrazados de agentes de seguridad. Su cuerpo fue encontrado diez días después, enterrado bajo un bloque de cemento en las afueras de Santiago.
Hasta ahora, han sido identificadas al menos 16 personas relacionadas con el crimen: siete en Chile, dos en Colombia y dos en Estados Unidos. Entre los detenidos hay miembros de una facción del Tren de Aragua, aunque aún no se ha determinado quién ordenó el asesinato.
El Ministerio Público chileno sospecha de vínculos con el chavismo y, en enero pasado, un testigo involucró al ministro del Interior venezolano, Diosdado Cabello, en el caso.
Infobae
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